El otro dia conversando con alguien, en un momento me dijo: - si tan solo hubiera ...
Recordé ésta historia, relatada por Thomas S. Monson, y que me sirve de reflexión...
"Una enternecedora dama de más de noventa años, me fue a ver un dia, e inesperadamente comenzó a relatar varias cosas que lamentaba.
Me contó que hacía muchos años, un agricultor vecino con el cual ella y su esposo en ocasiones discrepaban, le preguntó si podía tomar un atajo, por sus terrenos y así llegar al terreno de él.
Ella detuvo su narración y con voz temblorosa me dijo: " Tommy, yo no le permitía que cruzara por nuestros campos sino que le obligaba a que diera toda la vuelta, aun a pie para llegar a su propiedad.
- Estuvo mal y lo lamento... El ya no vive, pero cómo quisiera decirle: " Lo lamento mucho".
¡ Cómo desearia tener una segunda oportunidad!...
Creo que a la mayoria de nosotros, nos gustaria tener segundas oportunidades para enmendar errores, pero algunas de esas oportunidades, no siempre se presentan o quizas nunca lleguen.
Entonces, es tiempo de perdonarnos a nosotros mismos, tratar de hacer mejor las cosas y albergar buenos sentimientos hacia quienes nos rodean.
Ojalá! siempre vivamos, la primera oportunidad, sin egoismos y resentimientos.
Ojalá, nunca tengamos que decir como la anciana de la historia ...
- ¡Como desearia tener una segunda oportunidad!
Que tengan un lindo dia!
Marisol
Fuente: Liahona julio 2002 pag.19-22 Cuñas escondidas; Thomas S. Monson Prdte, LDS.